Fachada de cavas Freixenet

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Freixenet y los sindicatos llegan a un acuerdo sobre el ERTE para hacer frente a la sequía

El texto prevé una reducción de la jornada laboral de entre el 20% y el 50% en función de las necesidades productivas de cada época del año

4 mayo, 2024 14:03

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El Grupo Freixenet ha llegado a un acuerdo con los sindicatos para implementar un ERTE que afectará a los trabajadores de las vinícolas Freixenet y Segura Viudas, ante la falta de uva por la sequía que ha reducido la producción del sector del cava desde 2021.

En concreto, los empleados de estas dos empresas verán su jornada laboral reducida entre un veinte y un cincuenta por ciento, en función de las necesidades productivas de las diferentes épocas del año y la intensidada de los efectos derivados de la sequía, ha informado la compañía en un comunicado este sábado.

El texto firmado entre las partes propone que el expediente de regulación temporal de empleo entre en vigor el próximo día 13 de mayo y culmine a fecha de 31 de diciembre. Y, según ha detallado la empresa, "además del subsidio que los empleados afectados reciban por parte de la Administración Pública, Grupo Freixenet les compensará con ayudas complementarias", además de haberse comprometido a "proteger determinados colectivos", que no ha definido, "pagas extras y vacaciones".

Reclamación de los sindicatos

Freixenet hizo pública su voluntad de someter a 615 trabajadores a un ERTE por causas mayores el pasado 22 de abril, cuestión que fue rechazada por los sindicatos y el Departament d'Empresa i Treball de la Generalitat. Los trabajadores y la institución pública consideraron que, si bien la sequía había causado una situación difícil para el sector vinícola, como para muchos otros, las condiciones no se daban para poder justificar la excepcionalidad de la medida.

Es por ello que, finalmente, la reducción de jornada se ha determinado por motivos económicos, técnicos y organizativos o de producción. Desde el primer momento en que la noticia se comunicó a los empleados, sus representantes sindicales defendieron la necesidad de que la reducción horaria se articulase en función de la propia demanda laboral del ciclo de producción del cava, que no es igual en todos los meses del año.